En la madrugada, alrededor de las doce, los gritos provenientes de una casa en la calle Batanes número 1 en Alcalá de Henares alertaron a los vecinos. Un joven de 25 años había estrangulado a una mujer de 53 años, causándole la muerte en su propia vivienda.
Tras cometer el crimen, el sospechoso llamó a la Policía para confesar el asesinato, y ahora se investiga la naturaleza de la relación entre ambos.
Cuando los servicios de emergencia llegaron al lugar, encontraron a una mujer tendida en el suelo sin signos vitales. Los servicios médicos confirmaron su fallecimiento. La escena del crimen fue examinada por los agentes del DEVI de Policía Científica, y el grupo VI de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid se hizo cargo de la investigación.
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